Cómo despertar el Poder

A diferencia de lo que solemos pensar, poder no es lo mismo que fuerza. Tampoco es imposición, lo que implica que hay otra parte con sumisión. Poder tiene más que ver con despertar el poder de uno mismo.

Desde SABio definimos Poder como: la capacidad de vivir en el mundo en conexión con el Estado Neutro.

Desde pequeños aprendemos que hay personas que tienen autoridad y debemos responder, respetar y a veces subordinarnos a su requerimiento. Hay reglas sociales que nos permiten convivir en comunidad al respetarlas, pero no debemos confundir el respetar los roles de autoridad con el abandonar y perder el poder personal.

Cada persona, independientemente de su edad, rol, profesión o actividad tiene Poder. 

Lo que suele suceder es que se pierde de vista el poder personal y se pone en primer plano el poder externo, aquí nos referimos a la influencia de las decisiones, la jerarquía en puestos sociales o  laborales, etc. En algunos casos incluso, se genera una confusión al punto tal que se considera poder a la capacidad de imponer la propia voluntad. El mayor riesgo que puede darse de estas confusiones es el asociar el valor personal a la respuesta que dan otros a ese requerimiento., cayendo así en situaciones de altos niveles de estrés o grandes depresiones por no distinguir el valor y poder personal de aquel que tiene el rol social o laboral que se ocupa.

La Desarmonía En Poder

Cuando hay Desarmonía en Poder podemos experimentar extremos:

• Sentir que todo el poder está dado en lo externo y por lo tanto una sensación de impotencia o desvalorización internas.
• Rechazar o desvalorizar el poder externo y sólo dar autoridad al poder interno.

En ambos casos se pierde el equilibrio, no hay armonía. Porque el balance y equilibrio se da en la armónica interacción entre el poder externo y el interno.

Cuando el Poder está plenamente volcado al exterior, puede haber una gran desesperación inconsciente por pertenecer,  por acceder a lugares importantes, por demostrar en lo externo el alcance de mis decisiones y una desesperada búsqueda de confirmación del cumplimiento de “mis demandas”, son personas que suelen verse como avasallantes, obstinadas o dominantes. Esto se produce a partir del dolor de experimentarse sin poder interno.

Otra forma de experimentar esta vivencia parece ser opuesta pero tiene la misma raíz: el vivirse como impotente, incapaz y desautorizado. Aquellas personas que se suele decir que están en “rol de víctima”, que no pueden sostener su decisiones frente a un cuestionamiento externo, que no pueden sostener una opinión propia y que se ven aparentemente débiles y sumisas.

Por el contrario, cuando se rechaza el poder externo, se puede vivir una rebeldía, un rechazo a los órdenes jerárquicos, una extrema oposición a las autoridades, incluso hacia la percepción del poder de pares. Pueden ser personas altamente competitivas y percibidas por el entorno como conflictivas e imponentes. Otra forma de experimentar esta desarmonía en apariencia opuesta pero de mismo origen son aquellas personas que se alejan del entorno y buscan salir de sistemas sociales, pueden percibirse como ermitaños o reticentes a la interacción social.

Cabe destacar que estas referencias son ilustrativas y llevadas al extremo, todos podemos experimentar situaciones en las que nos vivimos con estas características, eso no implica una desarmonía, siempre hay que verificarlo.

La Clave de estas desarmonías es la pérdida de equilibrio entre lo externo y lo interno.

Cuando hay Armonía en Poder

Imagina una persona que tiene la habilidad de observar y atravesar situaciones sin juicios de valor, que experimenta el sostenimiento de su ser en el desenvolvimiento de los acontecimientos, que puede conectar con su forma única de expresión y transmitir esa visión. Una persona que lejos de estar en conflicto con el entorno, tiene un intercambio de desarrollo en cada puesto laboral que ocupa, sus roles sociales son ejercidos con respeto y enriqueciendo en sus interacciones.

Esa persona es una persona que vive el despliegue de la vida en el exterior en consonancia con el Poder Interno.

Lo Maravilloso de trabajar el Poder desde la perspectiva de SABio, es que se hace en consonancia con el entorno, se difuminan las barreras entre lo externo y lo interno, se borra el conflicto entre el dar y el recibir, porque lo externo pasa a tener diálogo con lo interno, el dar se convierte en recibir y el recibir es una forma de dar. 

La persona que experimenta la Armonía en Poder, no sólo experimenta  ese balance, sino que lo trae al entorno.